domingo, 23 de septiembre de 2012

15 lecciones aprendidas.



Me he dado vueltas en la cama. Me he levantado a pies descalzos en busca de un tazón de té pensando en un panal de abejas. A raíz de una loca conversación hace unos días en la playa (de la cual, honestamente, recuerdo la mitad- pleno 18, favor no juzgar!) me di cuenta que he sacado varias lecciones en mi vida a punta de porrazos; costalazos sangrantes donde muchas veces he dejado más que un pedazo de rodilla en el camino. Dicen que un hombre inteligente aprende de sus errores y el hombre sabio, aprende de los ajenos. Yo solo soy inteligente.  Remuevo la bolsita de té pensando que eso de inteligente también es discutible… En fin, el punto es que iba a empezar a estudiar francés (cosa que vengo intentando desde ayer con cero concentración) y me di cuenta que empecé a aplicar una de mis frasesitas aprendidas a punta de porrazos poco dignos para darme ánimos y no me quedó de otra que empezar a escribir a ver si así mi cabeza deja de zumbar en frecuencia modulada y me deja repasar franchute.

1-     Familia es familia. Puedes gritar, patalear, discutir pero son los primeros en estar al pie del cañón cuando lo necesitas. No hay familias perfectas y desconfía de quien  venda la suya como tal. El valor que tiene la familia es que muchas veces, pese a lo disímiles que son sus integrantes, pese al tiempo y las fisuras que pueden acaparar, siguen entrelazando sus destinos en busca de algo mejor; te regalan fe mas allá de un sentido religioso… te enseñan a creer.

2-     Los amigos son la familia que escoges y se les debe cuidar tanto más que a los de tu sangre. Pocos pero buenos; con el tiempo aprendes que tienes muchos conocidos y pocos amigos pero que ellos lo llenan todo.

3-     Siguiendo el punto anterior, hay dos cosas que no se deben transar en esta vida: Familia y amigos. Somos un pack y venimos con ambos dos de agregados. Quien está contigo acepta todo el pack. (Estaban antes y seguirán estando después que el futuro-ex-de-turno)

4-     Has con el tiempo que se te ha concedido algo maravilloso que te haga vibrar. No dejes pasar los días empeñándote en algo que no te haga sonreír, que no te motive. Si no te gusta lo que estás haciendo, deja de quejarte y busca un cambio. Nadie más que tu puede velar mejor por tu felicidad.

5-   Busca nuevas metas. Sea empezar a hacer ejercicios, ascender a un mejor puesto, algo tan estúpido como dejar de tirar la ropa en el baño o tal vez emprender un viaje a un país lejano. Como dicen por ahí, todo viaje parte con un paso pequeño como sucede también con un gran cambio. Teniendo tantas opciones de caminos ¿Por qué conformarse en el punto en el que estás? Es como ir a una heladería y pedir siempre el mismo sabor. Atrévete, sonríe, conoce y aprende. Quien sabe a dónde te puede llevar el nuevo desafío.

6-     Juégatela. ¿No tienes ganas de hacer algo? Pregúntate por qué debes hacerlo y por qué escogiste ese camino. Las energías llegaran sola si estás haciendo algo que te gusta y creo que es un indicador importante para determinar si vas bien. (No tengo ganas de estudiar franchute pero escogí esto y me maravilla. Sacaré energías hasta de la última taza de la doceava taza de café si es necesario. Si fuese algo de derecho probablemente me hubiese dormido sobre algún código…) Si algo no funciona y has buscado las mil formas de que resulte, entonces simplemente no debe ser. Si te están cerrando la puerta en la nariz no es la casa a la que debes entrar. Tómalo como señal del destino. Cuando las cosas deben ser, todo fluye.


7-    Se el mejor. Al menos esfuérzate por ser el mejor. Da lo mismo el área, desde médico, arquitecto, pintor o lustrabotas. Trabaja por ser el mejor; por dar el máximo de ti y lo mejor de ti. Todo esfuerzo tiene su recompensa y solas se abrirán las puertas.

8-    Todo pasa por algo. Puede que en el momento no veas el por qué pero, eventualmente, al mirar para atrás, ves que está todo conectado. Algo debías aprender, a alguien debías dejar ir, a alguien debías conocer, algo debías cambiar… Hay personas con las que tienes una conversación de menos de una hora y te aportan algo valiosísimo que ninguno de tus amigos de años o años o familia te habían dado. Simplemente se cruzó en tu camino y aportó un gran granito de arena del que tu, sin importar el paso del tiempo, lo podrás olvidar.

9-  No te aferres, aprende a dejar ir y quédate con lo mejor. Sea trabajo, amigos, pareja… aprende a que en esta vida hay ciclos, algunos de ellos duran más, otros menos y hay que saber desprenderse. No desees mal a quien parte, espera lo mejor porque alguna vez lo quisiste mucho y ese sentimiento traspasa los malos momentos vividos. Deja ir y deséale la felicidad del mundo. Cerrar ciclos implica necesariamente que se te viene uno nuevo y de seguro, aun más sorprendente que el anterior!

10-   Busca una pareja jeep; un 4x4. Alguien que vaya contigo a todas. Que te acompañe desde a un bautizo, pasando por una comida de trabajo, carrete con amigos a asado familiar con el mismo entusiasmo. Alguien que te mueva el piso, que te haga reír y te reencante día a día.  Alguien que crea en ti cuando hasta tu mismo flaqueas… Que te motive a ser mejor persona, que sueñe contigo y se impulsen mutuamente. Estamos llenos de defectos, mañas, trancas pero cuando ves a la otra persona, consciente de todos sus “contras”, como alguien lleno de luz, retenla. Has todo lo posible porque no se escape de tu mundo.

11- Las mejores cosas de mi vida me han pasado portándome como un “loco”. He dado saltos de fe sin asegurarme si había agua allá abajo, simplemente he saltado en la oportunidad o en busca de una oportunidad porque no quiero llegar a los 80 años pensando “y que hubiese pasado si…” Prefiero arrepentirme de las cosas que he hecho de las que he dejado de hacer. Al menos se que lo intenté y no me quedé cobardemente en la orilla segura.

12- Solo tienes el aquí y el ahora. Está bien soñar, proyectarse, sacar un mapa y elucubrar nuevas rutas pero no te olvides del ahora. Tu pareja está ahora, tu familia está ahora, tus amigos están ahora; todo lo demás que pasa por tu cabecita, de concretarse, no servirá de nada si ellos no están presente. Nuestra armonía es muy frágil pero cuando la logramos, nos vuelve invencibles.  

13-  No te calles. Habla. Di qué te pasa. Las personas que te rodean no tienen una esferita mágica para saber qué te sucede. No te enojes porque no adivinan qué pasa en tu mundo. Juntando letritas, verbalizándolas, usualmente se soluciona todo.

14-   Y ya que estoy hablando de palabras, ten cuidado con el poder que ellas transfieren. Puedes enaltecer a alguien con ellas como hundirlo en el peor de los infiernos. Las palabras tienen un poder asociado que nos transforman. Las palabras en buen D'ni crean mundos. Sino pregúntate cuánto te cuesta decirle ahora a alguien “te amo” y cuánto te costaba decirlo cuando eras más chico…

15-  Y por último pero no menos importante,: Besa siempre con el alma en los labios y con la conciencia de que ese puede que sea el último beso.

Ya, creo que mi cabeza al fiiiiiin quedo en silencio. Abandonaré el té y empiezo con las tazas de café para franchute. Ojalá me aporten con otras frases :) De todo se aprende en esta vida!