sábado, 30 de agosto de 2014

Galletas Chewy de Nutella!!! [Receta]

¿Qué tan obstinada puedo llegar a ser? Pues... tendría el puntaje completo de todo tipo de escalas.

Hace días que llevaba pensando en unas galletas de nutella. Si! esa mágica y deliciosa pasta de cacao y avellanas que acelera el corazón de muchísimas personas en el mundo. Recuerdo que hace un tiempo atrás había preparado unas siguiendo una receta que encontré en internet y quedaron bien pero sin gusto a nutella, solo a chocolate.No cumplieron mis expectativas! Y como ando como chocaholic en tiempo de pascua de resurrección, decidí intentarlo de nuevo.

¿Cómo se me ocurre tanta tontera para hacer? Desperté antes de las 6 am con la lluvia diluvio... Hasta las 7 am en que me arrastré a la cocina por mi café, tuve muuucho tiempo para planear maldades.

Así que estuve en el super a las 8:30 decidiendo que tamaño de nutella llevaba a casa... es una perdición que venga en tantos tamaños! Mi amigo imaginario malvado se abrazó a un mega frasco y creo haber escuchado que le propuso matrimonio. En tanto, mi amiga imaginaria responsable, la Domi, sacó la calculadora y empezó a sacar cifras de cuánto ocuparía técnicamente en mis galletas y escogió un frasco mediano aludiendo que, si me llevaba el grande, ese resto de excedente terminaría en mis caderas (su honestidad a veces me masacra). Vivo, que claramente no estaba ni remotamente interesado en la compra de la nutella, se entretenía jugando con una pelota de fútbol que sacó del pasillo de juguetes azotándola contra las góndolas de alimentos y cuantos tobillos encontró en el camino.

Después de varias vueltas y trámites mañaneros, llegué con la nutella a casa sin tener claro aun qué receta hacer. Mi interrogatorio vía fb no surtió mucho efecto así que hice lo que cualquier cocinerillo de poca monta haría: Buscar imágenes de galletas de nutella en google hasta que una me llamó la atención.

Fue así como dí con la receta que les presento a continuación. Su grado de dificultad es mínimo! Realmente simples de hacer y queda en el paladar el sabor de la nutella. Los asteriscos los incluí yo, ya les explicaré el por qué.

Galletas Chewy de Nutella:

- 1/2 taza de harina sin polvos de hornear.
- 1 taza de nutella.
- 1 huevo grande.
- 1 cucharadita de polvos de hornear.
*** 3 a 4 cucharadas de azúcar flor.

Procedimiento:

Pre calentar el horno a 180°c. Tener preparada la bandeja con el silpat.
Partir batiendo el huevo con la nutella, luego incorporar la harina y polvos de hornear. Una vez listo, preparar pequeñas bolitas y disponerlas sobre el silpat separadas unas de otras porque se expanden.
Entonces, una vez dentro del horno le damos aproximadamente unos 10 minutos y estarán arrugosamente listas! (Para lo que hiperventilan frente al horno: verán que en un inicio "se inflan" y luego se "bajan" mostrando leves grietas en su superficie. Cuando noten esto ¡Sacar del horno! No las remuevan inmediatamente del silpat porque son muy frágiles calientes. Esperen unos 5 a 7 minutos y listo!).



¿Por qué agregué en asteriscos el azúcar flor? Porque cuando saqué mi primera bandeja horneada, sentí que les faltaba azúcar. Como ya no podía incorporarles azúcar granulada porque me quedarían los cristales enteros en la masa, salí del paso incorporando a todo el resto de masa que me quedaba azúcar flor y mejoraron sustancialmente. Es gusto de cada cual si las quieren mas dulces o no, yo solo cumplo con dejarles el tip de golosos jajaja!

Así que espero que se animen y las preparen este fin de semana. Super simples ideales para un buen latte.

martes, 26 de agosto de 2014

¡Bienvenidos a la Freidora del Séptimo Semestre!

Me estaba congelando. ¡Literalmente! No sé por qué esa sala es tan absurdamente helada que me sentía dentro de un abatidor temblando como gelatina, intentando poner atención mientras me castañeteaban los dientes ininterrumpidamente. No es broma, los que me conocen saben qué sucede cuando dejo de sentir los deditos de mis pies. Había exprimido mi vaso de café con marca de labial rojo furioso hasta el infinito y mas allá y trataba de hacer mi mejor esfuerzo de captar qué necesitaba para instalar una cocina de campaña. Si señoras y señores, cocinas de campañas. Esas enormes carpas o tiendas que aparecen en eventos al aire libre bajo las cuales trabajan un lío de personas bajo un sol abrasador de 32 grados -que adentro seguramente oscila en 40 grados entre hornos y planchas- con algunos insectos de por medio; la maravilla de trabajar en un ambiente natural tienen sus pros y contras! Entonces estaba yo, cual cubo de hielo, viendo si lo que había escrito a ciegas como ejercicio hace un rato atrás coincidía en algo con lo que los profesores mencionaban en clases. Y estaba en eso cuando mi amigo imaginario malvado me susurra malignamente "¿Y cuándo te pasaron qué debía tener una cocina de campaña?"

Hice memoria.
Nunca. 

Tampoco he trabajado en una cocina al aire libre y por poco me dejo llevar por ese impulso malévolo de replicar lo que seguramente varios estábamos pensando pero me quedé callada estirando las mangas de mi chaleco hasta cubrir toda mi mano. Ya he aprendido que donde manda capitán, no manda marinero y que también, calladita me veo mas bonita. Si no lo sé deberé buscarlo por mi cuenta. Así funciona el equilibrio del mundo del adulto. ¿No sabe? Busque. Y no alegue que ahora todo está a un click de distancia.
Nota mental: Averiguar sobre cocinas de campaña. Buscar bosquejos de disposición de equipos y, solo por si se ponen mas quisquillosos, cotizaciones de arriendos.

 Si el semestre pasado en taller de cocina temática sufrí bastante (ya sé con qué palabra puedo definir ese taller: Angustia!) ahora, cuando nos explicaban qué se venía en séptimo semestre, pues siento honestamente que el barco va medio a la deriva. Como que veo venir el iceberg!!! -no ahondaré en el tema escabroso amoroso jajaja!-  Ahora somos nosotros quienes debemos dar la clase y guiar a nuestros compañeros como si fuéramos profesores. Hasta ahí todo bien ¿no? Si, claro que me encanta dar clases ¡pero de temas que me gusten!

Por ejemplo, los moluscos, crustáceos y todos esos animalitos del mar y yo no nos llevamos bien.
De hecho mientras mas lejos este de unos erizos o choritos tanto mejor para mi! Y para ellos porque tienen altas probabilidades de correr la suerte del salmón en España: ser revividos con mi super poder de resucitación para volver a matarlos a estocada poco asertivas. Y en mi profundo congelamiento hasta pensé en partir al terminal pesquero un día...dos días, no sé y ofrecerme a trabajar gratis hasta que lo pueda hacer con los ojos cerrados. Supongo que no me quitará la bronca que le tengo a la mayoría de los seres vivos del mundo marino pero puedo aprender a manipularlos mejor... al final es todo cosa de práctica, o no?

Repetir una y mil veces la misma acción hasta que sale perfecta.

Son en esos momentos en que soy mas consciente de mi vulnerabilidad. De todo lo que me falta por saber. 
Hacer clases de algo que no sé al dedillo es como la fórmula perfecta para cinco horas de tortura extrema en clases con un profesor que seguramente no estará muy feliz conmigo y un rotundo y bien merecido dos de nota. No creo que me felicite porque los bivalvos piden ayuda a gritos histéricos cuando me ven cerca con un cuchillo ¿Cierto?... Mmmmm... bivalvos cobardes!
Si todo sale bien me tocará la clase de carnes pero de venado y avestruz sé lo mismo que de arameo...  Y ese déficit no lo podré arreglar en el terminal pesquero. A meter la nariz en la biblioteca y ser la piedra en el zapato de cuanto profesor tenga a la redonda!

En los demás ramos del semestre si soy honesta, voy con las antenas paradísimas a clases. Si, estudiemos gastronomía con administración...claro que no es muy complicado... matemáticas básicas...

¿Básicas?! Me viste la cara o qué?!!! Mentir así tan descaradamente a alguien debería estar penado por la ley!

Nuevamente con la calculadora en la mochila. Hace unos días en Evaluación de Proyectos sentí que el profesor se dio vuelta hacia la pizarra y en vez de un plumón súbitamente tenia un martillo y un cincel y hacia lindas figuritas en la roca-pizarra. Mala suerte mía (iba a ser de otra!) que la mayoría del curso son repitentes y ya vieron Estadísticas y les habla en un idioma que todos parecen entender menos yo. Y como sucede conmigo cuando me pongo nerviosa, me empecé a reír. Maldita reacción que tengo pero al principio - y en mi defensa- fue bajito y ya luego eran carcajadas! En algún momento el profesor pregunta a la clase si había alguna pregunta y estuve tentadísima a responder "Si profesor, desde el título en adelante no entendí pelotas!" Me mordí la lengua y, tratando de contener mi risa, le tuve que pedir que me descifrara todos esos garabatos ininteligibles (según mi parecer porque estoy segura que era la única con orejas de burro ante sus fórmulas) porque, y le expliqué,  recién estaba cursando Estadísticas. Ya luego con la aplicación de esos mamarrachos en un ejercicio logré entender mas menos.

Y nuevamente le pregunto al de Arriba por qué no me dio el gen matemático.

No sé por qué estoy contándoles de ésto si yo quería hablar de unos maravillosos lugares y platos que había visto en Pinterest cuando llegué del gym. Hasta les iba a mencionar que quería viajar a Madagascar... todo a raíz de pinterest y los pingüinos maliciosos y bueno, después salto, salto y encontré un paraíso babeante de fotografías que me dejaron verde por ir. En fin, para los que ya llevan tiempo leyéndome: Bienvenidos a mi séptimo semestre!!!





domingo, 17 de agosto de 2014

Pearl Jam y las Cocadas con Chocolate [Receta]

Creo que es el aroma lo que me tranquiliza... es casi como comer por la nariz mientras revuelvo el chocolate bitter en su baño maría. No, es sucedáneo así que no lo voy a templar; solo quería sentir el aroma que me reconforta en este fin de semana de subidas y bajadas. ¿Qué haré con él? ni idea... quizás unos tazones de chocolate caliente... unos bombones de robots rellenos de mazapán...no sé.

El chocolate podría tener el super poder de llevarme a otra dimensión donde sonara Pearl Jam todo el día. Ayer, sin poder dormir, estuvieron en mis oídos reconstruyendo y desconstruyendo la noche anterior con una lupa y unas pinzas que el mejor de los médicos cirujanos la envidiaría . Hoy siguen de banda sonora. Porque parece que a cada individuo que me araña el corazón le asigno inconscientemente una banda sonora.
También llegue a la conclusión de que no quiero tener mas bandas sonoras, no al menos por ahora... ya son demasiados los traspié, las caídas, el pensar positivo y volver a lo mismo. No entiendo por qué aquellos que ya estuvieron conmigo me dicen que soy genial, que en verdad fueron unos idiotas al dejarme ir... que desean retomar contacto, que extrañan hablar conmigo... ¿Por qué? ¿Con qué fin?. De qué me sirve saber de todos esos por los que he caído lo estupenda que soy si, cuando estuve ahí, con ellos, no lo pudieron ver?


Revuelvo lentamente dejando que el chocolate me embriague... respirando profundo hasta que la última neurona de mi cerebro comience a bailar cha cha cha. No debe ser casualidad que cuando tenemos pena recurramos al chocolate. Estoy segura que si trabajara en una chocolatería sonreiría aun mas y mis amigos imaginarios andarías super felices con la boca cubierta de chocolate. (Nota mental: Buscar trabajo en una chocolatería)

Y la canción que estoy escuchando es tan balada increíblemente desgarradora que me para los pelos. Y probablemente estaré escuchando Pearl Jam hasta que se me pasé la tontera y estaré mirando mi baño maría hasta que fuera del fuego comience a solidificarse y muy tontamente lo vuelva al calor... esperando...

Esperando no sé qué mierda porque nada va a pasar.



Y creo que como muda me iría bastante mejor, ¿me lo recordarán? La próxima vez que este enojada me gritarán "muerdete la lengua" porque nadie necesita tantas verdades. Porque no es bueno quedar tan expuesta, no? Dejar tan expuesto a otro tampoco... No, después de este silencio que lleno con canciones al azar que se me van revelando a medida que pasan los minutos.
Lo único bueno de decir todo es que no llegaré a los ochenta pensando "¿Y que hubiese pasado si..?." Siempre termino diciendo lo que siento... y lo que pienso, en las ocasiones mas inauditas, pero lo digo. Puedo ser estúpida pero nunca ciega y trato de jugar cuando alguien me interesa. Otra cosa y cuento aparte son los malditos piscinazos en pelota cuando no hay agua... pero cuando hay, ¡Diablos que se siente bien!

De un momento a otro me llega mi corona de reina de las estúpidas por correo. ¡Viene con baterías incluídas para que brille en la oscuridad! Yeiiiiiii!!!

En fin...creo que botaré este chocolate. Si lo hago chocolate caliente me tomaré las calorías. Si lo hago bombones me las comeré... y ¿qué gano con eso? Solo peso. Que mierda sentirse mal y ni si quiera poder comer chocolate como los deprimidos decentes!

Pero como esto es un blog de estudiante de gastronomía con problemas cardíacos adicta a los porrazos, les dejo una receta que me gustó por su simpleza. Su ingrediente principal lo asocio a verano, a alegría, vacaciones y sonrisas hasta el amanecer. ¿Ven que mi inconsciente va mas rápido que yo?
Ahora sé que también quiero vacaciones. Patudamente porque tuve dos semanas recién jaja!

Cocadas con chocolate:

Ingredientes:
- 4 claras de huevo
- 3 tazas de coco rayado.
- 3/4 taza de azúcar.
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla.
- 1/4 cucharadita de sal
- 200 gr. de chocolate bitter.
* Yo le agregaría unas dos cucharaditas de mantequilla.

Preparación:
Pon todos los ingredientes, menos el  chocolate en un bol. Lleva a baño maría y mezcla durante 6 o 7 minutos (seguramente hasta que no sientan los cristales de azúcar). Refrigera por mínimo 2 horas.
Luego, haz bolitas de dos centímetros de espesor y ponlas en una placa en el horno sobre el papel mantequilla.
Hornea a 170 °celcius por entre 12 a 15 minutos, hasta que los bordes esten dorados.
Derrite el chocolate a baño maría (Ven que todo esta conectado?....tal vez no bote mi chocolate y lo use en estas cocadas! Tendré que regalarlas!) Y deja enfriar las cocadas y luego baña las bases con chocolate bitter derretido.
Extraído del libro "Las mejores recetas con Chocolate" de Editorial Nexus.

Y bueno... ya tengo el chocolate, creo que me pondré a hacer cocadas con Pearl Jam. En una de esas a Eddie le gustarían... ¿No? Manos ocupadas, cabeza ocupada... entonces el engranaje se sigue moviendo y no miro el techo esperando mi corona. Esperando algo que no sucederá. No me aleguen, ya?: seguramente empieza el Open Season de mi horno.

Los quiero!










viernes, 1 de agosto de 2014

...Si abres la olla a otro también terminas abriendo el corazón.

Ya se cumplen 3 años desde que decidí emprender este camino. Venía de vuelta a casa tras matricularme para mi séptimo semestre, pensando en todas las alegrías, las lágrimas, los cortes, dolores de huesos y quemaduras que tengo en este tiempo. ¿Vale la pena?

¡Totalmente!

Por cambios en mi horario de matrícula, también tuve que suspender mi happy hour y me quedé pensando en cuanto he cambiado yo en estos años y creo que no voy tan mal. Tengo un carácter horroroso, como me dijo una almita hoy "tu no eres una chica muy fácil de llegar" y creo que probablemente moriré siendo así. Me encantaría decir que puedo modificarme pero básicamente seré el mismo ingrediente en diferente presentación. Soy complicada, como buena leona. Tengo fortalezas como también tengo fuertes debilidades. He tenido que aprender a escuchar y también aprender a no escuchar. He debido aprender a trabajar en equipo viniendo de otra carrera en que somos lobos esteparios solitarios. La cocina es trabajo en equipo y si abres la olla a otro también terminas abriendo el corazón. Tengo un popurri de amigos increíblemente bellos de diferentes edades, tendencias sexuales que hasta escuchan reggaeton y ya no me salta el ojo; supongo que fue parte del proceso abrir mi cabezota a nuevas cosas en la vida. Antes odiaba los ostiones, ahora me gustan... ¿Quién lo diría?

Este viaje va bien, con todo va super bien.

Siento que volvía ser niña, volví a sorprenderme en la vida. De pronto todo se volvió en colores y a muchas cosas le he dado una oportunidad que ni a palos lo hubiese hecho anteriormente. Me he atrevido a jugar, a no ser tan dura conmigo, a ser increíblemente tozuda cuando quiero sacar algo adelante y también a dejar ir algo cuando  ya no tiene vuelta. Ahora doy segundas oportunidades. La cocina siempre será mi terapia, mi refugio. Cuando estoy estresada prendo el horno y ya esta! Se va el 50% de mi problema. Me despeja, me llena, me enoja en muchas ocasiones y, por sobre todo, me desafía. No es una competencia con el resto, es conmigo. Si me quedó bien algo a la primera quiero que la segunda vez quede fantástico. Soy de las idiotas que se sienta a pensar con un buen café cómo diablos arreglar una preparación hasta que le doy en el clavo aunque tenga que prepararla muchas veces e investigar otro tanto.

Vivo tentada. Paso el día pensando en qué maldad nueva podría preparar y qué ingredientes me faltan para poner las manos en la masa.

Creo que en cierta medida la cocina me devolvió a la infancia. Me llevó a creer que si sueño con ser astronauta, puedo llegar a ser astronauta. Me devolvió la sonrisa y el dormir por la noche. Cumplí mi sueño de viajar y quedé con gusto a poco... ¿Vendrán mas viajes? Ojalá. Salir con mapa en mano sin tener idea bien hacia donde voy y terminar perdida en un café mirando a las personas pasar sin prisa de mi reloj, sin la locura del engranaje... solo disfrutando la vista. Sentir que estoy perdida sin estarlo jajaa! Es una sensación bastante extraña.

Ya probé que sobrevivo ¿No? Hace tres años estoy probando vivir.