sábado, 5 de julio de 2014

Receta de Chocolate Caliente (Especiado).

No sé por qué los sábados despierto tentada. Debe ser porque mi vida de nómada estas últimas semanas me ha tenido algo alejada de la cocina que, de pronto, al despertar en mi cama, empiezan a cruzar muchas ideas malvadas de qué hacer con las horas que tengo por delante. Hoy mi obsesión fue el chocolate caliente. Aclaro que este particular brebaje nunca a sido santo de mi devoción. Me trae recuerdos de cumpleaños infantiles con vasos plásticos llenos de un humeante mal chocolate caliente en polvo con, a veces, exceso y otras veces nada de azúcar y cero cuerpo. Yo deseaba probar hoy ese chocolate espeso que te revoluciona los latidos... Ya saben, ese chocolate amargo que sabe a pecado y da lo mismo que te autorepliques que el próximo encuentro con la eliptica será doble, lo vas a probar. Y no solo eso ¡Lo vas a adorar!

Entonces empecé a investigar... Yo tenía de referencia mis tazones de chocolate caliente con churros españoles que, tengo que confesar, causan una extraña y perversa adicción. Entonces partí el café mañanero con internet buscando y buscando recetas. Habían unas muy básicas de cacao en polvo y agua, cacao en polvo y leche mas azúcar pero no necesitaba ser una experta para concluir que esa linea de recetas no me llevarían mas que a mis horrorosos recuerdos de chocolate caliente de cumpleaños. Segundo café y mi ampolleta se prende! Averigué que los españoles lograban esos maravillosos tazones con mi adicción gracias a unas tabletas de chocolate especial que llaman "chocolate a la taza" que trae también algunos espesantes aparte del cacao y ahí, voilà la textura! ¡¡¡Ese era el secreto!!!

Yo no tenía a mano esas tabletas.
 ¡Y yo quería mi tazón de chocolate!

Mis opciones para espesar - de acuerdo a lo visto en clases y en consideración al stock en mi despensa- eran básicamente cuatro:
- Yema de huevo.
- Crema.
- Maicena.
- Harina.

Huevo no le pondría ni a palos. La leche que ocupo para mis cafés es descremada asi que mi idea flaqueaba raquiticamente en este punto; necesitaba si o si dar textura. Crema sería una bomba de calorías  (y si señores, uno también piensa en ello cuando cocina!) y la harina pues, ni hablar! Opté por la maicena. Ahora solo me quedaba dilucidar si quería chocolate solo, especiado o con malicia.

¡Especiado!  Ya pensaría lo de la malicia.


Nuevamente investigar. Porque por instinto para mi danzan perfecto el chocolate con la vainilla y con canela. Pero quería mas. Quería bailar con los sabores ¡Quería el gran y poderoso tazón que hiciera llorar a los otros chocolates calientes!

 Tercer café y ya sabía mas menos que música tendría mi fiesta privada:

- Cardamomo: solo una pizca porque no queremos que el chocolate sirva de descongestionante nasal. El cardamomo en su dosis justa permite resaltar los sabores del chocolate y potenciar sus notas.
-Nuez moscada: Según leí hace un tiempo atrás, quita ese efecto empalagoso del chocolate, nuevamente en su justa medida. O sea, no te pongas a rayar como loco nuez moscada. Solo una pizca, tipo pizca de deditos de bebé.
-Vaina de vainilla: ¿Si los aztecas ya la ocupaban para realzar el sabor del cacao por qué yo no? Adentro media vaina loca.
- Media rama de Canela: Otra muy buena combinación que los mexicanos conocen desde hace muchísimo tiempo.
- 2 Clavos de olor: esta fue de tincada... si la canela y el clavo de olor quedan bien en mi navegado ¿Por qué me debería fallar en el chocolate?
- Zeste de Naranjas: Para aromatizar esta dupla es inseparable!
-Anis estrellado: Solo lancé una estrellita depositando toda mi fe en ella; su dulzura y su aroma fue una apuesta que no pude resistir.

¿Ya te tentaste? Si la respuesta es si, . vas a necesitar:
- Una olla.
- Un batidor manual (si no tienes, dale con una cuchara o tenedor)
- Una taza para medir.
- Un tazón para servir.

Es ahora cuando mis amigos imaginarios empiezan a dar saltitos en el aire porque llegó el momento de ejecutar el experimento. ¿Qué ingredientes necesitas para jugar con nosotros?

- Medio litro de leche descremada. No seas como yo y usa la entera si tienes esa en casa. Seguro que da aun mejores resultados!.
- Calculo entre unos 150 a 200 gr de chocolate bitter marca Belcolade (Si confieso que lo hice al ojo!). Insisto que esa es la marca que yo adoro pero si tienes otro en casa, bienvenido sea. Lo importante para mi es que tenga un buen porcentaje de cacao y que sea amargo para que el chocolate no me hostigue al primer sorbito.
- 1/3 taza de azúcar. Pensé en poner endulzante pero ya le haré variaciones, Vamos primero tanteando terreno. Si eres de aquellos tolerantes al azúcar, este es tu item! Incorpora cuanto creas que es necesario según tus gustos.
- Todas las especias mencionadas anteriormente!!!
- 2 cucharaditas de maicena.

Yo me dejé llevar, saben? Puse la olla al fuego con la leche, el azúcar y las especias. Esperé a que hirviera para que éstas últimas liberaran sus aromas a la leche y la saqué del fuego. Filtré la leche para retirar las especias e incorporé rápidamente mis preciosas monedas de chocolate Belcolade cual Golum revolviendo sin parar hasta que comenzaron a derretirse. ¡Para ese entonces mi corazón daba saltitos de felicidad!. Nuevamente puse la olla a fuego bajo y revolví hasta que tomó temperatura para luego, incorporar la maicena disuelta en un poco de agua. Revolver sin parar hasta que tome textura y listo, señoritas, señores y amigos imaginarios! ¡Chocolate caliente!



Lo serví en mi tazón de chocolate y toqué el cielo. ¡Me encantó! Había pensado decorar con crema chantilly pero de verdad que no fue necesario. Espero que se motiven, lo intenten y me dejen sus comentarios. Increíble para este frío invierno.

Los quiero!

No hay comentarios:

Publicar un comentario